Migrant Clinicians Network, una organización sin fines de lucro dedicada a la justicia en salud, lamenta y condena los asesinatos de George Floyd, Breonna Taylor, Ahmaud Arbery, y Tony McDade. El racismo, como hemos presenciado a través de la historia de nuestra nación, y que hoy continúa siendo pernicioso, implacable y sin ser atendido, tiene consecuencias mortales. La violencia racial y brutalidad policiaca extensamente propagada y en ocasiones altamente visible, no son el alcance total del racismo en Estados Unidos. El racismo estructural, profundamente arraigado en muchas de nuestras instituciones incluyendo, pero no limitándose a los sistemas judiciales y de salud, amenaza la vida diaria de las personas alrededor de toda la nación. Comparado con blancos no-hispanos, los negros americanos sufren de injusticias en salud desde su nacimiento hasta su muerte, con una mayor tasa de mortalidad infantil y baja expectativa de vida en general. Las desigualdades sociales derivadas del racismo histórico y contemporáneo resultan en peores resultados de salud. Las personas de color tienen acceso inadecuado a la atención médica, incluida la falta de acceso a suficientes instalaciones de salud. Estas desigualdades agravantes conducen a peores resultados de salud, que luego se enfrentan a sesgos implícitos y explícitos en la sala de examinación. La crisis de COVID-19 deja al descubierto los resultados de tales injusticias de salud; los estadounidenses negros están muriendo de COVID-19 a un ritmo casi tres veces mayor que el de los blancos.
Las vidas negras importan. Nos negamos a permanecer neutrales. Condenamos la violencia racial y defendemos la justicia racial. Reconocemos que el racismo generalizado en nuestra sociedad es una amenaza grave y continua para la salud pública. Defendemos la transformación de nuestros sistemas sociales para garantizar un tratamiento equitativo. Exigimos el fin de las prácticas y normas que continúan hoy y que han llevado a cientos de años de traumas compuestos causados por el racismo. Exigimos que se adjudique responsabilidad cuando ocurre la injusticia. Y pedimos nuevos sistemas inclusivos, sostenibles y equitativos para garantizar finalmente la justicia en salud para todos.
Lecturas adicionales (disponible en inglés):
The New England Journal of Medicine has run several important and well-researched perspective pieces:
“Structural Racism and Supporting Black Lives — The Role of Health Professionals [2]”
“Misdiagnosis, Mistreatment, and Harm — When Medical Care Ignores Social Forces [3]”
“Inequity in Crisis Standards of Care [4]”
CDC’s “COVID-19 in Racial and Ethnic Minority Groups [5].”
Left Voice’s “Structural Violence, COVID-19, and The Bronx: A Black Physician on Health Inequities [6]”
The Century Foundation’s report, “Racism, Inequality, and Health Care for African Americans [7]”
Amplify our collective voice with a contribution [8].
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